Ayuda a pensar nuestra profesión el paralelismo con guías de montaña. En vez de tener un estado físico envidiable, una especial tolerancia a la falta de oxígeno, experiencia analizando el clima, juntos tenemos más de 40 años de experiencia en el ámbito que nos desarrollamos.
La caída de los mercados posterior a la burbuja puntocom, la crisis sistémica de la burbuja hipotecaria, la crisis que se produjo durante el COVID y las numerosas crisis argentinas, no son lo mismo que una tormenta a cinco mil metros de altura, pero tienen un paralelismo que nos sirve para trabajar con nuestros clientes.
Nuestro trabajo no termina en lo que nosotros podemos hacer solos, sino que demanda una comunicación y una capacidad de trabajar en equipo para llegar a buen puerto. Esto es especialmente importante cuando vienen las tormentas o cuando las condiciones no son las deseables. Plantear objetivos claros, establecer los esfuerzos que se pueden hacer, la tolerancia a atravesar situaciones no tan deseables es muy necesario antes de empezar la travesía para poder llegar hacia donde uno quiere, pero sobre todo para evitar episodios lamentables. La confianza en el trabajo en equipo en momentos de fuertes tormentas tanto en el mercado de capitales como en la montaña, es muy importante.

Consistencia:
Uno de los consensos más importantes que se observan cuando uno releva a que atribuyen como factores de éxito los distintos inversores que tienen una historia de éxito en la industria de la administración de activos es la consistencia. ¿Pero que es la consistencia? Según la RAE los sinónimos de consistencia serían: sólido, compacto, denso, duro, firme, resistente, estable, permanente, durable, coherente, congruente. Existe enorme cantidad de maneras de tener buenos resultados en la administración de activos, los hay mas y menos volátiles, los hay mas y menos rentables y los hay mas y menos complejos. Pero lo que no se puede esperar, o al menos es muy difícil es esperar buenos resultados si se cambia de estrategia porque no preformó como uno quería en el corto plazo. Dicho al revés: es una buena estrategia si se quiere fracasar en esta materia cambiar de estrategia a cada rato porque una temporariamente no funciona.
A pesar de las numerosas publicaciones, la enorme cantidad de literatura que se puede encontrar respecto de lo que mejor funciona para la administración de la riqueza patrimonial, no se puede determinar cuál es la mejor manera de hacerlo en el corto plazo. Dado que cada persona es distinta y la capacidad de mantener una estrategia en el tiempo difiere en cada uno. Muchas personas no pueden mantener una inversión en el tiempo dado que no soportan la volatilidad que trae aparejada en los precios de los activos con cotización pública, tal como ejemplifica el grafico que les comparto abajo. El inversor promedio tiene una rentabilidad muchísimo menor que el mercado en general. Es por esto que es sumamente importante evaluar el tipo de inversión que se adecúa a las características de cada uno con el objetivo de poder ser consistente en el tiempo.

Es muy difícil establecer que es lo que va a funcionar en el corto plazo, y somos muy escépticos a la hora de escuchar a los que predicen las “condiciones climáticas financieras” bajo las que se navega durante el año. En la imagen que compartimos abajo van a ver que ningún activo es el que mejor preforma continuamente.

Lo que si se puede anticipar es resultados muy buenos si uno es consistente. A menos que esta vez se acabe el mundo tal y como lo conocemos hoy día. No suele ser el caso. Llegar a buen puerto en el proceso de inversión demanda ineludiblemente soportar momentos de performance no tan positiva, perderse algunos activos de moda, soportar “tormentas” financieras y ser consistente en el tiempo.
10/01/2024 – Marcos Elizalde